Recuerdo cuando me regalaron a Cristóbal era como una lombriz amarilla. Su tacto sigue siendo tan suave como el primer día. Nunca sale de mi cuarto, le encanta el rincón de los libros.
Qué cantidad de ratones se comía, ahora ya no tiene bastante, ha pasado a tragar conejos enteros. Eso me da pena. Sí, me da pena. Pero es el ciclo de la vida. Unos mueren para que otros vivan. Cristóbal no se aparta de mi un segundo, últimamente, hasta se acuesta conmigo, no he visto serpiente más fiel. En que me meto en la cama allí está, pegada a mi, no veas cómo ha crecido, casi es tan larga como yo.
Siento lo que voy a decir, amigo, sólo te está midiendo. Cristóbal nunca tuvo dueño.
Qué cantidad de ratones se comía, ahora ya no tiene bastante, ha pasado a tragar conejos enteros. Eso me da pena. Sí, me da pena. Pero es el ciclo de la vida. Unos mueren para que otros vivan. Cristóbal no se aparta de mi un segundo, últimamente, hasta se acuesta conmigo, no he visto serpiente más fiel. En que me meto en la cama allí está, pegada a mi, no veas cómo ha crecido, casi es tan larga como yo.
Siento lo que voy a decir, amigo, sólo te está midiendo. Cristóbal nunca tuvo dueño.
El amor juega una pasada,el final magnifico lo de "te esta midiendo", alli para mi haces un giro radical, quitas la fuerza romantica del amor,y vas a la realidad, mi interpretacion " es de esta midiendo", es que quiere comerte y lo afirmas en " nunca tuvo dueño".
ResponderEliminarLa naturaleza deL reptil es clara y no tiene amigos
Moraleja no convivas con reptiles.Besos