jueves, 24 de septiembre de 2009

Cabo da Roca


Pluma y papel. Coche y carretera. Pájaros y aire y agua. Sol y rayos. Luna y estrellas.

Le gusta conducir hasta el final del camino, hasta dónde la tierra acaba y comienzan las aguas que la rodean. Encrespada costa en la que se corta el océano sangrando espuma blanca. Y allí está ella mirando el continuo movimiento que hasta el infinito alcanza.

El frío en su cara le hace resurgir, una y otra vez, como cada ola, siempre resurgir, cada vez de una forma. Olor a salitre pétreo, imposible de detener, se clava hasta el cerebro, afilando la punta para no ser olvidado.

Borracha de aire puro cae de espaldas sobre la suave hierba, y rueda y rueda, cuatro vueltas, sólo cuatro vueltas. Las gaviotas, con su canto pesquero, detienen el juego, vuelan recto y lejos, blancas y negras, a través de los rayos de los dedos del sol hasta el horizonte.

Sonrisas, sólo sonrisas. Ella vuelve al coche, recuerda que algo la encerró mucho tiempo y que ahora ya nada la encierra. Entonces deja el camino, sigue campo a través adentrándose en la tierra. Mientras, en la soledad de la noche, deleitándose en la idea, mira al cielo que también ríe con su sonrisa más sincera, porque la luna crece, rodeada de puntos brillantes que al navegante orientan.

Pluma y papel. Coche y carretera. Pájaros y aire y agua. Sol y rayos. Luna y estrellas.

3 comentarios:

  1. Me gusta Asteroide :).
    Qué buena es la sonrisa de dentro, la de fuera, la que se siente cuando sabes y te sientes conectado con algo más, y libre, fuera de encierros... cuando sabes que todo está bien :).
    Pluma y papel, coche y carretera, pies y caminos, pájaros y aire y agua, sol y rayos, luna, estrellas y asteroides :)
    Un beso sonriente :))

    ResponderEliminar
  2. Felicitaciones, Azul, por tu nuevo nombre.
    Me agrada que te guste y que me lo digas:o))

    ResponderEliminar
  3. un escrito alegre, me gusta leerlo vivirlo y recordarlo en invierno
    besos

    el color azul de una paloma de la paz

    ResponderEliminar